NUEVA COLECCIÓN DE CAMAS INFANTILES INSPIRADAS EN CASAS DE MUÑECAS

Las casas de muñecas nos retrotraen a nuestra infancia o a épocas pasadas en las que niños y adultos coleccionaban muebles y figuras en miniatura, y en ocasiones, recreaban su modo de vida, incluyendo escenas cotidianas.

En nuestra entrada de hoy, unimos dos conceptos relacionados con los muebles y la decoración: las réplicas en miniatura que poblaban estas preciosas casas de muñecas y los muebles inspirados en ellas.

Los primeros vestigios de uso y coleccionismo de estas maquetas o casas de juguete los encontramos en los siglos XVII y XVIII, en países del Norte de Europa como Alemania, Holanda e Inglaterra, y un poco más tarde en EEUU. A España no llegan hasta bien entrado el siglo XIX y no eran demasiado comunes.

Según distintos documentos históricos la primera de estas casas en miniatura fue encargada por la Electora de Sajonia en 1512 como regalo para sus tres hijas por Navidad. Otra fecha importante en su historia fue 1558, año en el que el Duque Alberto V de Baviera, gran amante de las maquetas y de las miniaturas, pidió a un artesano que fabricara una bonita casa de muñecas para su hija, que después acabó incorporando a su colección particular. Todas ellas con el tiempo se han ido perdiendo. La más antigua que se puede contemplar hoy en día es la Casa Nuremberg, datada de 1611 y se puede visitar en el Museo Nacional de Alemania.

Las casas de muñecas aúnan dos conceptos: el de casa en miniatura y el de armario donde guardar las muñecas y los escenarios de juego. Respondiendo a esta duplicidad de significados o funciones, encontramos distintas variantes dependiendo del país de procedencia de los distintos modelos.

Otra premisa que caracterizaba la procedencia y rasgos de cada casa de muñecas era que, en un principio, estas piezas no estaban pensadas para que los niños jugaran con ellas, sino únicamente como objetos decorativos, pues se consideraban un capricho o un lujo, sólo al alcance de coleccionistas o familias adineradas. A los niños, sólo se les permitía jugar con las cocinas de juguete, con piezas más grandes y factura menos elaborada.

De acuerdo con esto, analizaremos las particularidades de cada modelo según su país de procedencia:

Alemania: las casitas alemanas estaban pensadas como elemento didáctico. La familia alemana de la época consideraba importante enseñar a sus hijas el funcionamiento de la casa y a ser buenas amas de casa. Por ello, contaban con muebles en miniatura totalmente realistas y muy elaborados. Cada una de las estancias estaba perfectamente equipada con todo lo necesario. La mayoría de ellas, aunque tenían laterales y tejados realistas, carecían de puertas o fachada delantera. En este caso, le daban más importancia al contenido de la casa y a los muebles que al exterior, puesto que su intención era mostrar la sección del edificio.

Holanda: este caso quizás sea el más paradigmático y señalable. Los holandeses acaudalados coleccionaban porcelana, pinturas y muebles de alta calidad, realizados con maderas nobles. A modo de capricho, encargaban miniaturas de todos estos objetos de colección y los guardaban en un elaborado armario o vitrina, diseñado como una casa, en la que exponer estas pequeñas joyas. Éstas, al igual que las alemanas, carecían de fachada, pero disponían de unas puertas que protegían el interior y le daban ese plus de valor e importancia a esas pequeñas piezas de coleccionista.

Inglaterra: los coleccionistas ingleses hacían un uso distinto de estas casitas. Para ellos estas piezas debían cumplir el propósito que sugiere su nombre: ser una réplica en miniatura de una casa, con una fachada realista. Estos no se limitaban a coleccionar o exhibir las réplicas de muebles y accesorios, sino que las utilizaban para recrear escenas cotidianas, propias de su clase social y costumbres.

España: los modelos españoles eran propiedad de familias burguesas que las encargaban como maqueta antes de construir un edificio. Gracias a estas pruebas en miniatura podían apreciar el efecto en conjunto. Para ello, encargaban la estructura de la casa y el mobiliario a ebanistas, que realizaban réplicas en escala 1:10 en maderas nobles. Una vez terminado el cliente se hacía una idea aproximada de cómo iba a estar decorado y estructurado su nuevo hogar. A continuación, esta maqueta era utilizada por las niñas de la familia como casa de muñecas propiamente dicha.

Si el primer concepto versaba sobre las casas de muñecas y el mobiliario en miniatura que exhibían en su interior a modo de piezas de coleccionismo, el segundo, está relacionado con los muebles que se inspiran en ellas. En este caso, más que hablar sobre estas obras derivadas o guiños al concepto, os señalaremos unos cuantos ejemplos disponibles en nuestra tienda online.

En primer lugar, encontramos el 'Sinfonier Toscano de Lola Glamour', un mueble con cajones con frontales inspirados en la fachada de una casa de muñecas.

Otros ejemplos recientes en nuestra tienda online son las camas infantiles inspiradas en estas piezas. En este post destacamos cuatro modelos distintos, perfectos para el dormitorio de una niña.

1 - Litera infantil casa Cenicienta

2 - Litera infantil casa Blancanieves

3 - Cama infantil casita Ariel

4 - Litera infantil casa Rapunzel

¿Cuál es tu favorita?